Soy Milagros Carrizo, tengo 19 años y trabajo en un negocio. Aunque escuché hablar de Jesús desde muy chica, porque mi familia es cristiana, puedo decir que fue en julio o agosto del año pasado que lo acepté en mi corazón como mi único y suficiente salvador. Cuando conocí a Xami y Fer lo recibí en mi corazón y lo reconocí como mi salvador. Aun lo recuerdo, nos encontrábamos en Lucio V. Mansilla; ellas estaban en una misión, en JUnTOS. A pesar de que no recuerdo cuántos días nos vimos, fue genial, ¡me encantó conocerlas! En sus visitas, lo primero que hacíamos era jugar algún juego de cartas como el uno, entre otros.
Fue un encuentro diferente, me refiero a que nunca me sentí asfixiada, al contrario, al principio charlábamos y jugábamos. Luego, ellas me orientaban con la Palabra de Dios. Hasta ese momento yo no tenía biblia, entonces me preguntaron si me gustaría tener una. Por supuesto yo les respondí que sí y ellas amablemente me regalaron una, por cierto, muy muy bonita. Recuerdo que me leyeron versículos; algo de todo lo que aprendimos y que aún recuerdo fue que somos embajadores de Dios y que tenemos que llevar su palabra a cada lugar que vayamos.
Hoy con mucha alegría estoy haciendo discípulos y también estamos saliendo a evangelizar, ya que vivo en la misma ciudad que Shami, una amiga que vive en Deán Funes como yo, ambas vamos juntas a la misma iglesia.
Testimonios de Jóvenes que participaron en JUnTOS